El Futbol Americano siempre se ha caracterizado por ser un deporte de contacto, un deporte de golpes fuertes y un deporte que está muy relacionado a las lesiones.
Al menos eso es lo que la gente piensa de este deporte que estadísticamente tiene menos lesionados que el futbol soccer y en el que afortunadamente ha habido muy pocos fallecimientos. En la actualidad es más fácil tener un accidente de tránsito que salir lesionado en un partido de futbol americano.
Claro que ha habido muchos desenlaces trágicos, como los que se comentan en TRAGEDIAS DEL EMPARRILLADO, pero con todas las protecciones con las que se juega actualmente, las reglas a favor del jugador, etc., los accidentes dentro del terreno de juego han disminuido sustancialmente con el paso de los años.
Para Gus Frerotte sin embargo, una lesión lo alejó del terreno de juego por varias semanas en 1997 cuando militaba con los Pieles Rojas de Washington, aunque no fue precisamente en una jugada.
En la primera mitad del partido de la semana 13 en contra de los Gigantes de Nueva York, Frerotte anotó en acarreo de una yarda y durante su festejo cerca de los aficionados le dio un cabezazo a un muro acolchonado justo detrás de la zona de anotación. Frerotte no saldría al campo de en la segunda mitad y Jeff Hostetler tomaría su lugar como quarterback de Washington, Frerotte por su parte terminaría en el hospital con una lesión en su cuello. El partido contra Nueva York terminaría empatado a 7 después de que ninguno de los equipos pudiera hacer nada en tiempo extra. Frerotte jugaría unos cuantos snaps la semana siguiente ante San Luis, pero las molestias en el cuello no lo dejarían jugar ningún otro partido esa temporada.
La temporada de 1998 fue la última de Frerotte con los Pieles Rojas después de haber perdido el puesto titular a manos de Trent Green quien se encontraba en su segundo año en la liga. Frerotte se fue Detroit, y desde entonces ha desfilado por Denver, Cincinnati, Minnesota, Miami y actualmente se encuentra en San Luis. ¿Cómo habría sido la trayectoria de Frerotte si no hubiera dado ese cabezazo? Nadie lo sabe, seguramente ni él mismo, pero seguramente uno que otro día recuerda aquel episodio en el que perdió la titularidad con Washington debido a una lesión en la que fue él mismo el que se golpeó la cabeza contra un muro.
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